POLICIALES

Su ex la fracturó delante de sus hijitos: “Tengo hundida parte de la cara”

Vive en Gualeguaychú, fue integrante de la comparsa Papelitos y tiene tres pequeños hijos. Asegura que ellos fueron testigos de la feroz agresión. La cara le quedó hundida por un golpe. Venderán tortas fritas para ayudarla
“Recibí una agresión física por parte de mi ex el lunes 30, yo estaba con mis tres chiquitos. Ya veníamos de una separación hace unos meses. Lo llamé porque tenía que hacer unos trámites en la escuela por uno de mis nenes. Pasó la tarde, hasta la tardecita, y hubo una discusión y me agredió. De un puñetazo me tiró al piso”, contó Pamela Piedrabuena en Radio Máxima.

La mujer que fue integrante de la comparsa Papelitos en Gualeguaychú agregó que “él estaba incómodo por un dolor de muelas. Me separé por un montón de cosas que venía aguantando. Fue una discusión, yo me enojé por algunas actitudes hacia uno de mis nenes y hacia mí, salté, discutí con él que ya estaba como molesto. Empezamos a discutir, salimos al patio. No recuerdo si me metió al lavadero o me metí y me siguió atrás. No vi venir la piña, que me tiró al piso”.

Pamela dijo que “pegarme de esa forma, fue la primera vez. Venía recibiendo agresiones verbales, insultarme, dejarme la autoestima por el piso. Yo dejé mi trabajo hace tres meses, soy maestra. Venía acumulando muchas cosas y por eso decidí separarme y me quedé con mis hijos”.

Añadió que “yo creía que tenía una fractura, pero tengo cinco fracturas, hundida una parte de la cara. La misma noche que él me agredió hice la denuncia en la comisaría Cuarta, y me mandaron a Jefatura. Me vio un médico de Policía, me acompañaron al hospital. Él me decía que yo lo había provocado, le dije que se fuera. Los nenes (mellizos de 6 años y otro de 3 años) vieron todo”.

Sobre la fractura, remarcó que “el médico me dijo que tenía hundida una parte”.

La víctima tiene que operarse, por lo que este sábado se venderán tortas fritas en el club Juventud Unida de Gualeguaychú para ayudar a costear la cirugía.

“No cuento con algún ingreso. Hacemos cestería de juncos, el municipio me ayuda, así vamos”, dijo Pamela. Acerca de la operación, dijo que no sería en Gualeguaychú, y desconoce si IOSPER se la cubrirá porque dejó de trabajar en marzo.

No lo detuvieron

Acerca del botón antipánico, Pamela dijo que en su teléfono no puede aplicarse. Expresó que hasta el momento no ha sido amenazada, pero reflexionó que “si de una me quebró la cara, imaginate lo que me puede llegar a pasar. Para mí hizo algo gravísimo, pero a él no lo detuvieron. Me atendieron todos efectivos masculinos, ayuda psicológica de inmediato no recibí. Me sentí sola, como desprotegida”.

“Yo no sé cómo puede llegar a actuar, pienso que querrá ver a los nenes. Pero tengo miedo por mí y por mis hijos”, manifestó.

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