En circunstancias que aún no han sido esclarecidas, esta madrugada falleció Gustavo Martínez luego de caer del piso 21 de un edificio en el barrio de Belgrano, en la ciudad de Buenos Aires. La informarción la confirmó la policía que llegó al lugar del hecho luego de recibir un llamado al 911. La fiscal Laura Belloqui, de la Fiscalía Nacional Criminal y Correccional N°59, quedó a cargo de la investigación, que por el momento no descarta ni la hipótesis de asesinato ni la de suicidio ni por supuesto la de accidente.

Gustavo Martínez fue pareja de Ricardo Fort y se convirtió en el tutor de los hijos del empresario, Felipe y Marta, luego de su muerte. Si bien Fort declaró públicamente que el gran amor de su vida había sido Virginia Gallardo, siempre dejó en claro que la relación más importante que tuvo fue con Gustavo Martínez ya que fue quien lo acompañó en la decisión de tener a sus dos hijos, Felipe y Martita, a quienes trajo al mundo a través del método de vientre subrogado en la ciudad de Los Angeles. Además de ser su gran compañero, consejero y sostén incondicional, Gustavo es el padrino de los mellizos y quien actualmente se encarga de la crianza y el día a día de los chicos. Con Gustavo, Ricardo pudo construir una verdadera familia.

Fort y Martínez fueron novios de jóvenes v luego íntimos amigos. Gustavo fue tuvo un rol de acompañamiento fundamental en la decisión del empresario chocolatero de ser papá. “Gustavo fue la pareja más larga que tuve y planeé mis hijos con él. Fuimos a hacernos los estudios juntos y yo quise que ellos crecieran cerca de él también”, reveló alguna vez Fort . “Yo quería que lo llamaran Papá Gustavo, como a mí me dicen papá Ricardo pero él quiso ser su padrino porque decía que no le correspondía que lo llamen papá porque la sangre era mía. Mis hijos no sabían que Gustavo fue pareja mía por seis años, se los conté hace poco y la emoción fue enorme. Salieron rajando a gritarle ´Papá Gustavo´”, agregó.

Fort y Gustavo se conocieron en un bar. Lo relató Gustavo en una entrevista con Verónica Lozano. “Unos amigos me habían dicho nos reunimos a tal hora en tal lugar. Me quedé como una hora esperando, no aparecieron pero sí apareció él. El me habló, me dijo que iba a ir a un lugar,, fuimos y después con varios amigos terminamos desayunando en otro lugar. Y esto es anécdotico porque recuerdo que Ricardo siempre quería pagar todo. Y yo en ese desayuno saco la tarjeta y él me dice: ‘Lo pago yo’. Y yo dije ‘no’, le di la tarjeta al mozo y creo que eso lo movilizó”.

El año pasado, Gustavo había revelado que recibía señales de Fort. “Ricardo está presente sí, me acuerdo una vez que fui a un dormitorio enorme que él tenía de todo. Y una vez yo voy, entro y no escuchaba nada, no había nada y Ricardo ya había fallecido. “Escucho de repente y ruidos. Dame la puerta que me la llevo. Te lo juro. Fue fuerte y una vez a Felipe le pasó lo mismo en el mismo lugar, fue igual, ahora ya no voy”, comentó a radio Mitre.