Parece obra de un piromaníaco los recurrentes incendios de campos en la zona suburbana de Concordia. Ayer se quemaron más de 30 hectáreas.

La persona que prende fuego no ha podido ser visualizada, pero hay algunos indicios de que algo de ello ocurre porque luego que el foco ígneo se establece en un frente de doscientos o trescientos metros y avanza quemando todo a su paso, aparecen incendios desconectados del anterior y a un prudente distancia, como de 100 a 200 metros, lo que indicaría la presencia de un loco que va generando incendios.

El problema, decían los vecinos es la velocidad de propagación cuando hay viento. Es imparable y los bomberos no llegan con la rapidez que uno desearía. Por otro lado, dijo un vecino, Zapadores no actúa en la quema de campos porque reserva sus unidades para viviendas, lo que quiere decir que si tu casa se está por prender fuego y este avanza por el pasto tenés que esperar que se incendie para que acudan.

Los que atienden los llamados son el 103 de Bomberos Voluntarios, pero -según los dichos de los vecinos- el despliegue de las unidades es lento o la nerviosidad de las posibles víctimas del fuego es mucha, lo cierto es que se quejan de demoras de más de media hora y hasta de una hora. Por otro lado, nadie contiene del otro lado de la línea, es un aviso el que se envía pero no hay nadie que vaya preguntando como se desarrolla el foco ígneo.

No se sabe si las brigadas que está preparando la Municipalidad se pondrá en funciones inmediatamente porque con la llegada de la primavera-verano la situación va a ser explosiva.