Kueider juega su última carta ante la Corte Suprema de Paraguay para frenar la extradición
El ex senador nacional Edgardo Kueider enfrenta un escenario judicial cada vez más complejo en Paraguay, donde permanece detenido junto a su pareja, Iara Guinsel, tras haber sido sorprendidos cuando intentaban ingresar al país con 200 mil dólares sin declarar. Acusados de contrabando en grado de tentativa, ambos serán juzgados en abril del próximo año, mientras continúa en paralelo el proceso por su posible extradición a la Argentina.
Luego de sufrir reveses en las instancias judiciales inferiores, la defensa del ex legislador llevó ahora sus planteos ante la Corte Suprema de Justicia de Paraguay, en lo que representa su última oportunidad para dilatar el proceso de extradición solicitado por la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, quien lo investiga por enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y otros delitos conexos.
Aval fiscal y rechazos judiciales
La Fiscalía paraguaya se manifestó a favor de que Kueider sea remitido a la Argentina, aunque condicionó la extradición a que primero sea juzgado en Paraguay por el delito de contrabando. El ex senador rechazó el trámite simplificado, lo que derivó en la apertura de un juicio ordinario.
En ese contexto, los abogados defensores, Marcelo Bogado y Carlos Arévalo, presentaron una serie de planteos formales que no buscaban bloquear de manera definitiva la extradición, sino demorar los tiempos del proceso. Sin embargo, dichos recursos fueron rechazados en primera instancia por el juez de Garantías en lo Penal N° 9, Rolando Duarte, y luego ratificados por el Tribunal de Apelaciones, integrado por Jesús Riera Manzoni, Paulino Escobar Garay y Mario Torres Leguizamón.
Intervención de la Corte Suprema
Con estas derrotas judiciales, la defensa elevó ahora los planteos al máximo tribunal paraguayo, integrado por nueve ministros y dividido en distintas salas según la materia. En el caso de Kueider, intervendrán la Sala Constitucional y la Sala Penal.
La primera analizará la posible existencia de acciones de inconstitucionalidad, tras una etapa previa de admisibilidad. La segunda evaluará eventuales recursos extraordinarios, como los de casación. La Corte podrá ratificar lo actuado por los tribunales inferiores o disponer correcciones. Solo en este último supuesto el trámite de extradición podría sufrir una nueva traba. De lo contrario, el proceso quedará firme una vez que finalice el juicio por contrabando, cuyas audiencias están previstas para abril de 2026.
Los argumentos de la defensa
El eje de la estrategia defensiva se apoya en dos cuestionamientos técnicos. En primer lugar, sostienen que el pedido de extradición cursado por la jueza Arroyo Salgado fue canalizado por una vía incorrecta del acuerdo bilateral entre Argentina y Paraguay. Existen dos procedimientos posibles, contemplados en los artículos 10° y 19°, y Duarte entendió que correspondía aplicar el primero, mientras que la defensa afirmaba que debía utilizarse el segundo.
El segundo planteo apuntó a una supuesta falta de información suficiente para responder al dictamen de la Fiscalía que avaló la extradición tras el juicio por contrabando. No obstante, el juez Riera Manzoni fue categórico al rechazarlo y sostuvo que “no se observa perjuicio o menoscabo a los intereses o derechos de los recurrentes”, criterio que fue respaldado por los demás integrantes del Tribunal de Apelaciones.
Además, los magistrados consideraron que el planteo fue improcedente, tanto por el momento en que se realizó como por la naturaleza del reclamo.
Un futuro judicial cada vez más estrecho
Con este panorama, Kueider aguarda ahora la definición de la Corte Suprema de Paraguay, consciente de que se trata de su último intento para estirar los tiempos de una extradición que, por ahora, cuenta con aval fiscal y respaldo judicial en todas las instancias. Mientras tanto, el ex senador sigue detenido y deberá enfrentar primero el juicio por contrabando, antes de quedar, eventualmente, a disposición de la Justicia argentina.
