Pietro remarcó el caso de un paciente con VIH que llegó a 6 meses sin medicación por las demoras en PAMI
La médica infectóloga que se desempeña en el Hospital Felipe Heras comenzó apuntando que “cuando ocupa este lugar, a veces deber ser la voz de aquellas personas que se sienten agotadas, por todo el desgaste que sufren con el tema de la burocracia”.
La profesional contó que en el nosocomio de la zona sur “nosotros ahí atendemos a personas que no cuentan con obra social, pero en gran parte también a otras que tienen hasta prepagas; porque se sienten bien atendidos y quieren seguir yendo al hospital”, agregó.
Meses
Prieto afirmó que “son personas mayores, adultos mayores, con todo lo que eso conlleva”. Pero en lo que respecta puntualmente a aquellos pacientes que tienen la cobertura PAMI, “la gota que rebalsó el vaso es uno (de los pacientes) que hace seis meses que está sin tratamiento”, por la falta de entrega de los medicamentos correspondientes.
Según narró la médica, este hombre “tenía otra obra social mientras estaba activo, digamos, en el sistema de trabajo y luego, cuando se jubiló, pasó a tener PAMI y ahí comenzaron todos los problemas; anteriormente no había ningún inconveniente”, subrayó.
La profesional explicó que esta persona en particular, “bajó los brazos, está cansada, ya no quería hacer más nada; es como que renunció a los reclamos”, advirtió.
Ridículo
La doctora puntualizó que las excusas de la obra social para no dar el tratamiento de forma adecuada “son ridículas, por ejemplo, le piden por escrito, le habían puesto que el informe médico no era suficiente, le piden el resumen de las clínicas que habíamos hecho; va y viene, va y viene en un desastre continuo”.
En ese contexto, añadió, le “pidieron los primeros análisis de cuando había salido positivo el análisis de VIH, que son personas que hacen más de diez años, 15, 20, que están con la patología”. El damnificado “por suerte lo tenía – porque a veces con todo esto se pierden los documentos – se entregó pero le retrasaron porque decía que tenía que tener una firma y un sello de un bioquímico”, aseveró la médica.
La burocracia fue tal que “lo que se está diciendo es que la palabra nuestra, la del médico tratante, no es suficiente”, se quejó Prietro.
Medicación
La infectóloga insistió en que estos son casos – como los pacientes oncológicos – que no pueden esperar o suspender su medicación. “Aunque la persona contara con los recursos – que no es el caso – tampoco se pueden conseguir así como así, en una farmacia cualquiera”, enfatizó.
Según detalló, “son medicamentos costosos, o sea más de 100.000 pesos por mes; pero aún si tuviera la plata no se podría comprar”.
Respuestas
Por último, la profesional dijo que todo le provoca impotencia y “como que ya no sabemos qué más hacer, por eso uno termina recurriendo a esto y sabemos que gracias a ustedes – los medios – podemos hacernos escuchar, las voces de todos aquellos que están padeciendo situaciones como estas”.
El reclamo “nos llega a nosotros, somos nosotros la cara visible y es horrible, es muy feo”, remarcó. Subrayando que, cuando el afiliado concurre a la UGL 34 de calle Urquiza y Tucumán, “le responden que esto no depende de la unidad local, le responden que esto viene de PAMI Buenos Aires”, pero el punto es que “así lo tienen. Va y viene”.